Tarjeta de Red
Las tarjetas de red, también conocidas por sus siglas en inglés NIC (Network interface card), son elementos electrónicos que posibilitan la conexión de un equipo a una red local. Las primeras tarjetas de red se conectaban en un equipo a través de un slot de expansión en la placa base del equipo.
En la actualidad, todas las placas base incluyen ya la circuitería relativa a la interfaz de red, es decir, de la tarjeta de red, por lo que no es necesario conectar al equipo ninguna tarjeta de red a menos que la tarjeta de red incluida en la placa base se estropee o necesitemos una tarjeta de red con características especiales.
El diseño y las funciones implementadas en una tarjeta de red dependen de la tecnología para la que se va a utilizar. Actualmente la tecnología dominante es Ethernet, por lo tanto, todas las tarjetas de red que se pueden encontrar son tarjetas Ethernet. La mayor parte de ellas utilizan cable UTP y, por tanto, el conector que llevan incorporado es de tipo RJ-45. Sin embargo, existen especificaciones Ethernet que utilizan fibra óptica, por lo que también existen en el mercado tarjetas de red Ethernet con un conector para fibra óptica.
En cualquier caso, tanto si tenemos un equipo con tarjeta de red como si ésta está integrada en la placa base, lo más habitual es el uso de cable UTP y, por tanto, en la parte trasera de dicho equipo encontraremos un conector hembra RJ-45 utilizado para conectar el equipo a la red.
Las tarjetas de red llevan a cabo todo el procesamiento de las funciones 1 y 2 del modelo de referencia OSI en el equipo. Muchas de las funciones que veremos en los próximos apartados se llevan a cabo precisamente en las tarjetas de red.
Para que una tarjeta de red funcione adecuadamente en un equipo con el sistema operativo Windows o Linux es necesario que exista un controlador o driver. Dicho controlador posibilita que el sistema operativo pueda intercambiar Información con la tarjeta, es decir, permite la comunicación entre el sistema operativo y la propia tarjeta de red. Los sistemas operativos contienen internamente controladores para muchos modelos diferentes de tarjetas de red pero en algunas ocasiones será necesario instalar dicho controlador, que deberá ser suministrado por el fabricante de la tarjeta de red.
Una vez instalado correctamente el controlador, es posible acceder a algunos parámetros de configuración avanzados de la tarjeta de red. En la siguiente figura se puede observar la ventana de configuración en Windows XP: